top of page
María José Bracho

¿Cómo identificar una Pseudodemencia Depresiva?

La pseudodemencia depresiva oscila entre la demencia y la depresión, representando un reto al momento del diagnóstico. A continuación se presentan algunas características que orientan en su identificación.
 

La pseudodemencia depresiva es una condición clínica ubicada entre un cuadro neurológico y un cuadro psiquiátrico, sin pertenecer plenamente a ninguno de los dos. Sus fronteras diagnósticas no están claramente delimitadas, ya que oscila entre la demencia y la depresión, por lo que representa un reto para el clínico al momento del diagnóstico y del abordaje.


El concepto de pseudodemencia depresiva es controversial. Algunos autores postulan que la pseudodemencia depresiva es una categoría diagnóstica independiente, mientras que otros la consideran un síndrome de la depresión o un subtipo de demencia reversible.


Por un lado, Barjau Romero define a la pseudodemencia depresiva como “un trastorno afectivo depresivo que manifiesta clínicamente alteraciones cognitivas”, y la categoriza como un trastorno psiquiátrico independiente. Otro autor, Bulbena, la define como un trastorno neurológico y afirma que es un “trastorno cognitivo real producido por trastornos psiquiátricos funcionales como la depresión. Con frecuencia es reversible, parcial o totalmente, al resolverse el trastorno de base”.


Otros autores la consideran como un tipo de demencia reversible. Hay evidencia de pacientes cuyos síntomas cognitivos remiten después de recibir tratamiento farmacológico para la depresión. Sin embargo, otros casos muestran a la pseudodemencia como antesala para el desarrollo de la demencia.


Hay algunas pautas de carácter cualitativo que pueden orientar en la identificación de la pseudodemencia depresiva y diferenciarla de la demencia.

En la demencia primero se manifiestan los síntomas cognitivos y después los síntomas depresivos; mientras que en la pseudodemencia depresiva primero se manifiestan los síntomas depresivos y después los síntomas cognitivos. Algunos síntomas de depresión frecuentes en la pseudodemencia son la tristeza, la angustia, el sufrimiento, el aislamiento, la anhedonia, la alteración del sueño y del apetito, y la irritabilidad. A raíz de esta sintomatología, se genera dificultad en la atención, en la concentración y en la memoria.


Durante la entrevista y la evaluación neuropsicológica se puede observar que el paciente con pseudodemencia depresiva asiste a consulta de manera voluntaria, a diferencia del paciente que tiene demencia, quien es ajeno a su déficit y es llevado por sus familiares.


En presencia de una pseudodemencia, los síntomas progresan de manera muy rápida (en semanas) y son fluctuantes, se puede conocer el momento exacto de su inicio, y el paciente y la familia son conscientes del trastorno y de su gravedad. Por otro lado, cuando hay una demencia, el progreso de los síntomas es más lento (meses o años), tienen un curso progresivo y gradual, se desconoce el momento exacto de su inicio, y no es frecuente que el paciente sea consciente de su gravedad.


Debido a que son conscientes de su déficit, pacientes con pseudodemencia manifiestan quejas constantes durante la evaluación neuropsicológica. Es común escuchar frases como: “no sé”, “no puedo”, “no me acuerdo”, “soy incapaz”; hay angustia frente a los errores, cooperan poco, no dan su mejor esfuerzo y se niegan a hacer las tareas que encuentran difíciles. Por eso, en ocasiones, puntúan con un déficit más elevado en las pruebas o presentan puntajes muy variables en pruebas que miden la misma función.


Por el contrario, pacientes con demencia no son conscientes de su déficit, minimizan sus dificultades, ignoran sus fracasos y alaban sus logros, se esfuerzan mucho durante la evaluación, y suelen presentar puntajes más uniformes en las pruebas.


Es característico que pacientes con pseudodemencia presenten durante la evaluación neuropsicológica puntajes bajos en pruebas de memoria y en la curva de aprendizaje, sin embargo, la memoria de reconocimiento se mantiene casi intacta. La capacidad de denominación y la fluidez del discurso están conservadas, al igual que las funciones ejecutivas y las habilidades visoperceptuales y visoconstructivas.


Como se puede observar, la pseudodemencia depresiva es un cuadro clínico controversial y de difícil delimitación. Comparte síntomas con la demencia, y en muchas ocasiones se presentan juntas. Es importante llevar a cabo una evaluación neuropsicológica exhaustiva, realizar una entrevista completa y desarrollar un criterio clínico agudo que permitan el adecuado diagnóstico e intervención oportuna para cada caso.


Bibliografía

  • Barjau Romero, J.M., Guerro-Prado, D., Viloria Jiménez, A., Vega Piñero, M. y Chinchilla Moreno, A. (2002). Pseudodemencia depresiva: fronteras diagnósticas. Actas Españolas de Psiquiatría, 30(1), 43-53.

  • Nitrini, R. y Dozzi Brucki, S.M. (2012). Demencia: definición y clasificación. Revista Neuropsicología, Neuropsiquiatría y Neurociencias, 12(1), 75-98. ISSN: 0124-1265.

  • Schoenberg, M.R. y Scott, J.G. (2011). The Little Black Book of Neuropsychology: A syndrome-based approach. New York: Springer.

65 visualizaciones0 comentarios

Comments


bottom of page